La SEREMI de Agricultura, Carolina Torres, junto a la Directora Regional (s) del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), Ana Cabrera, visitaron el sitio de inspección fitosanitaria Teno con el fin de recorrer sus instalaciones, verificar las labores de inspección que realizan en conjunto el SAG y la Asociación de Exportadores ASOEX, y dar por finalizada la temporada 2017/2018 de exportaciones hortofrutícolas con destino al mercado norteamericano.
El funcionamiento de este lugar se da gracias al trabajo mancomunado entre el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA – APHIS), la Asociación de Exportadores de Chile (ASOEX) y el SAG.
Durante la temporada 2017/2018 en el Sitio Teno se inspeccionaron 6.188.992 cajas de fruta, siendo las principales especies manzanas, ciruelas, cerezas y arándanos, todas con destino a Estados Unidos.
Al respecto, la SEREMI de Agricultura, Carolina Torres, señaló que “este sitio de inspección es un ejemplo concreto de cómo es posible ayudar al desarrollo del sector agrícola cuando el Estado se presenta como un socio, ágil, eficiente, profesional y comprometido”. Agregó que “el Ministerio de Agricultura ha establecido 5 lineamientos de trabajo prioritarios para potenciar un sector silvoagropecuario competitivo, sustentable, innovador, moderno y a la vez comprometido con el desarrollo rural y territorial. En ese contexto, algunos de nuestros principales esfuerzos estarán centrados en fortalecer la acción del SAG, que es prioritaria e irremplazable para mantener y abrir nuevos mercados y para agilizar los procesos en el negocio de nuestros productores”, dijo.
Cabe mencionar que actualmente el SAG en sus instalaciones en Teno, proporciona servicios de inspección a 94 empresas exportadoras del país, desde la región de O´Higgins al sur. Esta actividad se complementa con el trabajo de similares características que realizan los sitios de inspección Los Lirios, ubicado en O’Higgins, y Cabrero en la región de Biobío.
“La labor que se realiza en el Sitio Teno es un ejemplo de coordinación público-privada, donde se cumple un objetivo de gran importancia para el país y la región, que es lograr que nuestros productos lleguen a los mercados de destino en las mejores condiciones para su comercialización”, señaló la directora regional (S) del SAG, Ana Cabrera, durante la visita.
Inspección conjunta
El sitio de inspección de Teno es un centro de revisión e inspección fitosanitaria de frutas, dentro de un programa de pre embarque SAG – USDA, el cual permite el ingreso de la fruta en forma directa a los supermercados a Estados Unidos, sin tener que pasar por una nueva inspección en destino. En estas instalaciones, y bajo estrictas condiciones de resguardo, se procede a revisar la fruta proveniente de distintas plantas frutícolas, tanto de la región del Maule como del norte y sur del país, bajo la normativa norteamericana lo cual se traduce en una inspección conjunta entre funcionarios del USDA designados en el recinto e inspectores SAG.
El Sitio de Inspección Fitosanitaria Teno, inaugurado el año 2010, cuenta con 8 mesas para revisión e inspección de muestras y 46 funcionarios operando, además de un laboratorio de entomología con avanzada tecnología.
Laboratorio de biología molecular
Durante la visita, las autoridades regionales recorrieron las instalaciones del moderno laboratorio de biología molecular de este sitio de inspección, en el cual se desarrolla un trabajo fundamental para la aprobación de lotes bajo inspección fitosanitaria del SAG.
SAG y ASOEX visualizaron la necesidad de dotar de una herramienta de última generación para el diagnóstico rápido -a través de la técnica de análisis molecular (PCR)- de la especie “chanchitos blancos”, los cuales constituyen una de las principales causales de rechazo en fruta para el mercado de Estados Unidos.
Este técnica permite la determinación del género Pseudococcus (chanchitos blancos) utilizando huevos o partes del insecto en estado inmaduro que se encuentran presentes en la fruta, permitiendo liberar rápidamente los lotes retenidos por presencia de restos de insectos, los cuales antes no se podían determinar fehacientemente. Esto facilita enormemente el proceso de inspección fitosanitaria ya que mejora el flujo de revisión de la fruta, elevando el nivel tecnológico y haciendo más competitivo el proceso de certificación fitosanitaria, permitiendo llegar al mercado norteamericano con la seguridad que este exige. Durante la última temporada se han aprobado más de 115.440 cajas que sin esta técnica habrían sido rechazadas para EEUU.