De acuerdo a los resultados de Laboratorio el insecto se encontraba en estado de larva, pupa y adulto vivo, lo que generó la implementación de medidas para el lote de 14 contenedores que transportaban la mercancía importada.
Una importante plaga forestal cuarentenaria ausente para nuestro país fue interceptada en forma oportuna por funcionarios del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Biobío, durante la inspección de ingreso de productos a Chile desde Kazajstán (Asia Central), lo que permitió adoptar las medidas para el lote de 14 contenedores que involucraba la importación con el fin de evitar su dispersión en el territorio nacional.
El Director Regional del SAG de Biobío, Iván Ramírez Delpín, explicó que “se trata de Monochamus galloprovincialis, la cual fue encontrada en estados de larva, pupa y adulto vivo en los embalajes de madera de una importación que se realizaba en uno de los puertos de la región. Esta plaga es de relevancia para el sector forestal, ya que actúa como vector del nemátodo de los pinos Bursaphelenchus xylophilus (plaga cuarentenaria ausente en Chile), es decir, es capaz de transportarlo desde el lugar de origen a una zona donde no esté establecido, pudiendo causar la muerte de los árboles como Pinus radiata, principal especie forestal plantada en Chile con más de 1.3 millones de hectáreas”.
Asimismo, indicó que producto del aumento del comercio internacional existe una presión de ingreso de plagas y enfermedades a través de los embalajes de madera y maderas de estiba. “En el caso particular interceptado recientemente, el embalaje pudo no haber sido sometido a un procesamiento o tratamiento adecuado que elimine o mate las plagas, lo que es un riesgo para cualquier país. Por ello la NIMF N°15 (Norma Internacional para Medidas Fitosanitarias), regula el embalaje de madera utilizado en el comercio internacional y describe las medidas fitosanitarias que se deben aplicar para reducir el riesgo de introducción y/o dispersión de plagas en los embalajes de madera, incluida la madera de estiba. El SAG reguló el ingreso de embalajes de madera al territorio nacional, por eso son inspeccionados por funcionarios del Servicio en las áreas de ingreso o en destino, y en caso de intercepciones se deben aplicar los protocolos definidos para estos casos”, dijo el directivo.
Por su parte, el Jefe de la Oficina del SAG Talcahuano, José Bravo Roznowski, indicó que los importadores deben exigir a sus proveedores el cumplimiento de la Resolución del SAG N°133 del 2005 y sus modificaciones (Resoluciones Nº 2859/2007 y 7008 del 2013), sobre los embalajes de madera de internación, solicitándoles que cuenten con un tratamiento fitosanitario (NIMF N°15) y su respectiva marca, además que estén libres de insectos. En caso de detectar insectos vivos (huevos, larvas, pupas o insectos adultos) o signos de insectos vivos, como viruta o aserrín proveniente de los embalajes de madera importados, se debe comunicar a la Oficina SAG más cercana.
Dentro de las medidas que deben cumplir los embalajes se contempla el uso de madera descortezada para confección de éstos y la aplicación de algún tratamiento fitosanitario para impedir el alojamiento de plagas, como tratamiento térmico o fumigación con bromuro de metilo. Además, se establece que los embalajes de madera deben ingresar al país con una marca reconocida internacionalmente para certificar el tratamiento realizado. Entre los embalajes de madera regulados se encuentran los pallets, bins, parrillas, marcos, jaulas, tarimas, cajas, cajones, tie bins, carretes, entre otros.